El alma de la quena
El Inca, en
la terraza vio caer el Sol, en paz de la tarde, oyendo la
misma melodía que escuchara en el camino la víspera. Es tan divina esa música,
Pachacámac, respondió Coya Chimpu, que no parece el canto de un hombre ni el
sonido de una quena. Si fuera un hombre el que toca esa música, me gustaría
tenerlo en el palacio. El inca escuchó con toda su atención y dijo al fin,
haciendo palmas como un niño:
·
-¡Yma
Samiyock! ¡Es una quena! ¡Buscad y traed a ese hombre! ...
Los guardias de
palacio decían: “Que Mamá Quilla lo ha desterrado para que haga morir a los
hombres con sus canciones de dolor”.
“¿Quién eres?”, preguntó el inca.
“Soy, Viracocha, del Ayllo vecino a la ciudad imperial”… “¿Quién te enseñó
a tocar la flauta? No me enseñó nadie,
Las blancas mujeres
del norte dicen: El inca, tu padre, quiere serte favorable: el hijo del sol te
dará lo que quieras Pide. Desde hoy vivirás en mi palacio y en mis jardines,
donde tu alma olvidará tu dolor y tu quena alegrará el castillo... Tocarás la
quena
¡Voy hacerte
feliz!... Tendrás trajes suaves de alpacas tiernas y siervos que
colmen tus deseos... Pero tocarás la quena”. ¡Padre mío! ¡Déjame ir por el
Mundo! ¿Quieres que sea feliz y que mi quena llore? No me des fiestas ni
riquezas, ni siervos, ni palacios.
Déjame salir, hijo
del sol, poderoso, Viracocha; no me arrebates lo único que me queda en la
tierra; no desencantes mi quena, no deshagas mi vida... Ve por el
mundo, Divino Errante. Lleva esta insignia del Inca para que nadie se
oponga a tu marcha... Ve... ¡Yma Sumac Yaqui!...
- “¡Aiguayá!...
¡Aiguayá! "(¡Adiós!, ¡adiós!) Dijo y beso el suelo a los pies del monarca.
Volvió a oírse el eco iste y desolado de la quena, en las
frondas lejanas.
-¡Yma Sumac Yaqui!...
¡Yma Sumac Yaqui!... Dijo el inca a la coya.
-¡Aiguayá!... sonó a
lo lejos la voz del artista.
La luna se ocultó.
2 comentarios:
Pienso que debe ser mas corto ya que estamos buscando resumen del cuento El Alma De La Quena
Esta muy bien resumido 😊
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